Si los precios del petróleo vuelven a niveles normales durante un largo periodo de tiempo, el Gobierno ha anunciado que se reducirá el impuesto sobre las ganancias extraordinarias de las empresas petroleras y gasísticas.
Si eso ocurriera, se afirmó que el tipo impositivo sobre las empresas disminuiría del 75% al 40%.
Las empresas que obtienen beneficios de algo de lo que no eran responsables son el objetivo de un impuesto por ganancias inesperadas.
El Gobierno lo introdujo el año pasado para ayudar a financiar su plan de reducción de los costes energéticos para hogares y empresas.
Los beneficios de las empresas energéticas han aumentado recientemente, primero por el incremento de la demanda tras la eliminación de las restricciones de Covid y después porque los precios de la energía subieron como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania.
Pero desde que alcanzaron sus máximos, los precios del petróleo y el gas han bajado.
El impuesto imprevisto se mantendrá hasta marzo de 2028, según un comunicado del Tesoro, pero la tasa disminuirá si el precio medio del petróleo y el gas cae hasta o por debajo de un nivel predeterminado durante dos periodos consecutivos de tres meses.
Los precios del petróleo se han fijado en 71,40 dólares por barril y los del gas en 0,54 libras por termia.
