En una localidad donde 13 personas murieron tiroteadas el sábado, el presidente de Honduras ha impuesto un toque de queda inmediato. .
Como un "brutal y despiadado atentado terrorista" calificó Xiomara Castro los asesinatos ocurridos en un billar de Choloma.
Doce hombres y una mujer fueron asesinados mientras asistían a una fiesta de cumpleaños.
Las autoridades informaron que al menos 20 personas habían muerto el sábado como resultado de homicidios separados en la zona norte del Valle de Sula, que se cree fueron cometidos por bandas de narcotraficantes.
A partir del domingo a las 21:00 hora local (05:00 BST), regirá un toque de queda durante al menos 15 días.
El 4 de julio se extenderá a la cercana San Pedro Sula, la segunda ciudad más grande de la nación centroamericana.
Las medidas, según la Sra. Castro, se tomaron en respuesta al "brutal y despiadado ataque terrorista perpetrado por sicarios entrenados y dirigidos por capos de la droga" en el Valle de Sula.
El gobierno hondureño ofrece una recompensa de unos 33.000 dólares (26.000 libras esterlinas) a cambio de información que conduzca a la identificación y detención de los responsables de los tiroteos de Choloma, junto con la promesa del despliegue de 1.000 guardias de seguridad adicionales en la región.
En un esfuerzo por combatir las bandas violentas, desde diciembre está en vigor un estado de emergencia parcial en algunas partes de la nación. El país ha luchado en los últimos años para controlar la escalada de conflictos y la delincuencia relacionada con las drogas.
La nación, junto con sus vecinos El Salvador y Guatemala, es un punto de tránsito crucial para la cocaína que viaja desde Sudamérica a Estados Unidos.
El tiroteo se produjo una semana después de un motín en una prisión a las afueras de la capital de Tegucigalpa, donde al menos 46 mujeres fueron asesinadas en actos de violencia de pandillas.
Las rivalidades entre la pandilla 18 y la MS-13, dos de las organizaciones criminales más notorias de Centroamérica, fueron las causantes, según relataron supervivientes a los medios locales.
