Los diputados del Parlamento irlandés no interrogarán a la ex directora general de RTÉ, Dee Forbes, sobre los pagos secretos realizados al presentador de televisión Ryan Tubridy.
Se le pidió que testificara ante el comité de medios de comunicación del Oireachtas (el parlamento irlandés), pero un portavoz dijo que no irá debido a su salud.
En lo que RTÉ reveló de 2017 a 2022, el Sr. Tubridy recibió 345.000 euros (296.000 libras).
El martes, los empleados de RTÉ protestaron fuera de sus lugares de trabajo después de que a muchos de ellos se les congelara el sueldo en los últimos años.
El Sindicato Nacional de Periodistas (NUJ), que organizó la manifestación, contó con la participación de unos 200 empleados.
Debido a los pagos encubiertos, se sienten "totalmente traicionados" por su empleador, según Stuart Masterson, presidente del grupo sindical de RTÉ.
Afirmó que "detrás de cada gran nombre que gana cientos de miles de dólares hay trabajadores de a pie, hombres y mujeres que no ganan grandes sueldos pero que lo dan todo para ofrecer un servicio público de radiodifusión".
El Gobierno ha exigido a la dirección total transparencia sobre los pagos efectuados a Tubridy, ya que RTÉ se financia con un canon de licencia.
"Se ha perdido la confianza, y RTÉ debe presentar los hechos completos al público", declaró la ministra de Medios de Comunicación, Catherine Martin.
La ministra ya ha solicitado una revisión de la cultura y la gobernanza de la radiotelevisión nacional irlandesa a una parte externa.
Según la declaración de Martin del martes, el público "quiere saber quién firmó los pagos" y quién más estaba implicado o al tanto de ellos.
La semana pasada, se anunció que el director de RTÉ y otros ejecutivos serían invitados a declarar ante el comité conjunto del Oireachtas sobre turismo, cultura, artes, deporte y medios de comunicación.
La semana pasada, la Sra. Forbes fue puesta en excedencia administrativa; el lunes, dimitió con efecto inmediato.
Después de ser nombrada en julio de 2016, había sido directora general durante casi siete años.