Una imagen captada por un piloto de caza mientras sobrevolaba el globo chino que fue derribado a principios de mes ha sido hecha pública por el Departamento de Defensa de EEUU.
Oficiales militares observaron el avance del globo a gran altitud sobre el territorio continental estadounidense mientras se hacían el selfie desde la cabina de un avión espía U-2.
Según Pekín, el globo era una nave meteorológica que se desvió de su rumbo.
Sin embargo, según Washington, el globo era un componente de un vasto programa chino de recopilación de información.
Al menos dos aviones vigilaron las características del globo y su trayectoria de vuelo mientras pasaba sobre territorio estadounidense.
Los sobrevuelos demostraron que "era capaz de llevar a cabo operaciones de recogida de señales de inteligencia", según afirmó a principios de este mes un alto funcionario del Departamento de Estado.
Cuando el globo entró en el espacio aéreo de Alaska el 28 de enero, las autoridades se percataron por primera vez de su presencia.
El objeto extraño fue localizado por cazas del Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial (NORAD), una operación conjunta entre EEUU y Canadá, pero los militares no lo derribaron en ese momento.
Según las autoridades, el tamaño del globo y el potencial campo de escombros suponían una amenaza para las personas en tierra, por lo que no pudieron derribarlo sobre tierra.
A principios de este mes, un funcionario de Defensa dijo a los legisladores estadounidenses que el globo tenía "una carga útil del tamaño de un avión de pasajeros" y era tan alto como la Estatua de la Libertad.
El 4 de febrero, un día antes de que el avión fuera derribado frente a la costa de Carolina del Sur, se tomó la foto que se hizo pública el miércoles. En el Pentágono, se dice que "ha adquirido un estatus legendario".
A 18.200 metros (60.000 pies), se dice que el globo estaba planeando. Según el Ejército del Aire, los aviones espía U-2 se elevan con frecuencia por encima de los 70.000 pies.
Los aviones monoplaza de reconocimiento y vigilancia, conocidos como Dragon Lady, fueron operados anteriormente por la CIA. Los pilotos están obligados a ponerse trajes presurizados completos, muy parecidos a los que usan los astronautas.
Los restos dispersos del globo en el océano Atlántico estaban siendo recuperados hasta el pasado viernes.
Según Sabrina Singh, subsecretaria de prensa del Pentágono, se han encontrado partes de los restos, incluida su carga útil, y se están examinando.